Impacto de la infección por COVID-19 en la progresión de la aterosclerosis coronaria: hallazgos en CCTA
La relación entre COVID-19 y el riesgo cardiovascular
Desde el inicio de la pandemia de COVID-19, múltiples estudios han analizado los efectos del virus en distintos órganos y sistemas, incluyendo el cardiovascular.
Un nuevo estudio, publicado en Radiology, revela que la infección por SARS-CoV-2 puede acelerar la progresión de la enfermedad arterial coronaria, aumentando la inflamación y la vulnerabilidad de la placa aterosclerótica.
Los hallazgos obtenidos mediante angiografía por tomografía computarizada coronaria (CCTA) destacan la necesidad de monitoreo cardiovascular en pacientes con antecedentes de COVID-19.
Diseño del estudio y metodología
El estudio retrospectivo analizó imágenes de CCTA en 690 pacientes con infección previa por SARS-CoV-2 y un total de 2.108 lesiones en arterias coronarias.
Estos datos fueron comparados con un grupo de control de 113 pacientes sin antecedentes de infección, quienes presentaban un total de 480 lesiones coronarias.
El objetivo principal fue evaluar la progresión del volumen de ateroma y la presencia de placas de alto riesgo.
Principales hallazgos del estudio
Los resultados indicaron que los pacientes con infección previa por SARS-CoV-2 presentaron:
- 28 % más de progresión anual del volumen de ateroma total (PAV) en comparación con los pacientes sin infección previa (90 % vs. 62 %).
- 36 % más de progresión anual del volumen de ateroma no calcificado, lo que sugiere un mayor riesgo de eventos cardiovasculares adversos.
- Mayor incidencia de placas de alto riesgo, con un 21 % en pacientes post-COVID en comparación con el 15,8 % en el grupo de control.
- Mayor atenuación del tejido adiposo pericoronario (PCAT) en pacientes post-COVID (27,1 % vs. 19,8 %), lo que indica un aumento en la inflamación coronaria.
Según el autor principal del estudio, el Dr. Neng Dai, del Instituto de Enfermedades Cardiovasculares de Shanghái, estos hallazgos refuerzan la hipótesis de que el COVID-19 exacerba el riesgo cardiovascular al acelerar la progresión de placas inestables y promover la inflamación coronaria.

Imagen destacada: Radiology
Aquí se pueden observar los cambios en la carga de placa y la atenuación del tejido adiposo pericoronario (PCAT) en imágenes de angiografía por tomografía computarizada (TC) basal y de seguimiento de un paciente con infección por COVID-19.
Mecanismos potenciales de la progresión acelerada de la aterosclerosis
El estudio sugiere que los procesos inflamatorios sistémicos desencadenados por la infección por SARS-CoV-2 podrían influir en la evolución de la aterosclerosis.
La inflamación crónica generada por el virus podría alterar la estructura de las placas ateroscleróticas, aumentando su vulnerabilidad y predisponiendo a eventos como infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares.
Además, los cambios observados en la atenuación del PCAT en los pacientes post-COVID refuerzan la idea de que el virus podría inducir una respuesta inflamatoria persistente, afectando la estabilidad de las placas coronarias.
Implicaciones clínicas y necesidad de monitoreo post-COVID
Estos resultados plantean interrogantes sobre la necesidad de integrar la historia de COVID-19 en la evaluación de riesgo cardiovascular.
En un editorial complementario al estudio, los doctores Jonathan Weir-McCall y Jack Bell señalaron que la incorporación de la CCTA como herramienta de evaluación del riesgo a largo plazo en estos pacientes podría mejorar la prevención de eventos cardiovasculares.
Dado que a nivel mundial se han reportado más de 800 millones de casos confirmados de COVID-19, la relación entre la infección, la progresión de la aterosclerosis y los eventos cardiovasculares plantea un desafío de salud pública.
Se hace urgente el desarrollo de estrategias para monitorear y manejar a los pacientes con antecedentes de COVID-19 y factores de riesgo cardiovascular.
Hacia un enfoque integral en la prevención cardiovascular post-COVID
Este estudio destaca la importancia de continuar investigando la relación entre el COVID-19 y la salud cardiovascular.
La utilización de CCTA para la identificación temprana de placas de alto riesgo y la evaluación de la inflamación coronaria podría desempeñar un papel clave en la prevención de complicaciones cardiovasculares a largo plazo.
A medida que se realicen más estudios en distintas poblaciones y con diferentes niveles de gravedad del COVID-19, será fundamental establecer guías que permitan un manejo más preciso de los pacientes con riesgo cardiovascular post-COVID.
Integrar esta información en la práctica clínica podría mejorar significativamente la detección y prevención de enfermedades cardiovasculares en el futuro.
Para conocer más sobre esta investigación puede visitar Radiology y acceder al artículo completo.
0 comentarios