Todo lo que necesitas saber sobre Mpox: Datos, síntomas, transmisión y tratamiento
Mpox, también conocida como viruela símica es una enfermedad infecciosa causada por el virus del mismo nombre, perteneciente al género Orthopoxvirus. Este virus tiene dos clados genéticos distintos, denominados Clado I y Clado II.
La viruela símica, a menudo confundida con otras enfermedades cutáneas y virales, ha sido objeto de un brote mundial significativo desde 2022.
Este artículo ofrece una visión completa de la viruela símica, abarcando datos, síntomas, transmisión, diagnóstico, tratamiento y la respuesta global ante el brote reciente.
Datos y cifras
El virus de la viruela símica, conocido como MPXV (Monkeypox Virus), es un virus con envoltura y ADN bicatenario, de la familia Poxviridae. Este virus está relacionado con otros ortopoxvirus, como los que causan la viruela humana y la vaccinia.
Existen dos clados genéticos de MPXV: el Clado I y el Clado II. El Clado II se subdivide en dos linajes, IIa y IIb, y es este último el que causó el brote mundial de 2022-2023.
La enfermedad generalmente se manifiesta con una erupción cutánea que puede durar entre 2 y 4 semanas. Otros síntomas comunes incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de espalda, fatiga y linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos).
El diagnóstico se confirma mediante pruebas de laboratorio que detectan el ADN del virus en muestras tomadas de las lesiones cutáneas.
Síntomas
Los síntomas de la viruela símica suelen comenzar entre 1 y 3 semanas después de la exposición al virus, aunque el rango puede variar entre 1 y 21 días. La enfermedad avanza en varias etapas y puede presentar los siguientes síntomas:
- Fiebre
- Dolor de cabeza
- Dolores musculares
- Dolor de espalda
- Fatiga
- Ganglios linfáticos inflamados
- Erupción cutánea: La erupción comienza como manchas planas que evolucionan a pápulas, luego a vesículas llenas de líquido y finalmente a pústulas que se secan y forman costras. Las lesiones pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, incluyendo palmas de las manos, plantas de los pies, cara, boca, garganta, genitales y ano.
En algunos casos, la erupción puede ser el primer síntoma, pero a menudo se presenta junto con otros síntomas. La enfermedad puede complicarse con infecciones secundarias, neumonía, inflamación del cerebro (encefalitis) y otras complicaciones graves, especialmente en personas inmunodeprimidas.
Transmisión
La viruela se transmite de diversas maneras:
De Persona a Persona:
- Contacto directo con lesiones infecciosas de la piel o mucosas.
- Contacto cara a cara (hablar, respirar cerca).
- Contacto piel con piel (tocar, relaciones sexuales).
- Gotículas respiratorias o aerosoles en caso de contacto cercano prolongado.
De Animal a Humano:
- Mordeduras o arañazos de animales infectados.
- Manipulación, caza o consumo de animales infectados.
Objetos Contaminados:
- Ropa, ropa de cama y otros materiales contaminados.
La transmisión a través de objetos contaminados o en entornos comunitarios también es posible, aunque menos común. Las embarazadas pueden transmitir el virus al feto durante el embarazo o el parto.
Diagnóstico
El diagnóstico de mpox se basa en la identificación de síntomas clínicos y la confirmación de laboratorio. Las pruebas de laboratorio preferidas incluyen:
PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa): Detecta el ADN del virus en muestras tomadas directamente de las lesiones cutáneas (piel, líquido, costras). También se pueden utilizar frotis orofaríngeos, anales o rectales si no hay lesiones visibles.
Pruebas Serológicas: Generalmente no recomendadas, ya que no distinguen entre los diferentes ortopoxvirus.
La diferenciación de la viruela símica de otras enfermedades como la varicela, el sarampión, las infecciones cutáneas bacterianas y otras infecciones de transmisión sexual es crucial para un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.
Tratamiento y Vacunación
No existe un tratamiento antiviral específico aprobado para la viruela símica, y el manejo se centra en el cuidado de apoyo. Las vacunas contra la viruela, que aún están aprobadas en algunos países, pueden ser efectivas para prevenir la viruela símica en ciertas circunstancias. El tratamiento incluye:
- Cuidado de la Erupción: Mantener las lesiones limpias y cubiertas para prevenir infecciones secundarias.
- Control del Dolor y Síntomas: Uso de medicamentos para aliviar el dolor y otros síntomas.
- Prevención de Complicaciones: Monitoreo de posibles complicaciones graves como infecciones secundarias y deshidratación.
La vacunación es recomendada especialmente para personas en riesgo, como el personal de salud, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, personas con múltiples parejas sexuales y profesionales del sexo.
La vacuna debe administrarse idealmente dentro de los 4 días posteriores al contacto con una persona infectada, aunque puede ser efectiva hasta 14 días después.
Cuidados personales y prevención
Para prevenir la propagación y aliviar los síntomas, se recomienda:
- Aislamiento: Permanecer en casa y en una habitación separada hasta que todas las costras se hayan caído y la piel esté completamente renovada.
- Higiene: Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, usar desinfectante, y cubrir las lesiones con una mascarilla en presencia de otras personas.
- Evitar Contacto: No tocar objetos en espacios compartidos y desinfectar frecuentemente.
- Cuidados Específicos: Enjuagarse con agua salada si hay lesiones en la boca, y tomar baños templados con bicarbonato de sodio o sal de Epsom para las lesiones corporales. Usar medicamentos de venta libre para el dolor como paracetamol o ibuprofeno.
Brotes históricos y respuesta global
Después de la erradicación de la viruela en 1980, la viruela símica tuvo brotes esporádicos en África Central y Occidental. El brote mundial que comenzó en mayo de 2022 se extendió rápidamente a Europa, las Américas y otras regiones, con alrededor de 87,000 casos y 112 muertes reportadas en 110 países.
En respuesta al brote, la OMS declaró una emergencia de salud pública de importancia internacional el 23 de julio de 2022. Se han publicado planes estratégicos y documentos de orientación técnica para guiar la vigilancia, el diagnóstico y la respuesta comunitaria para controlar la propagación del virus.
La viruela símica es una enfermedad infecciosa que puede tener consecuencias graves, pero con el conocimiento adecuado y medidas preventivas, es posible controlar y prevenir su propagación.
La comprensión de sus síntomas, transmisión, diagnóstico y tratamiento es esencial para protegerse a sí mismo y a los demás, y para responder de manera efectiva a los brotes.
Para más información detallada, consulta los documentos de la OMS y las directrices de manejo y prevención.
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